Kate Moss utiliza un Kelly de Hermès de 13.000 euros como bolso de playa
La supermodelo ha sido fotografiada en Ibiza usando a modo de capazo un Kelly que ronda los 13.000 euros.
El mundo entero tomó conciencia de lo cotizados y carísimos que son los bolsos de Hermès tras la subasta del primer Birkin. Éste y otros modelos icónicos como el Kelly parten de los 11.000 euros, por lo que normalmente los vemos colgados de brazos millonarios y respetuosos que los tratan con cariño.
Pero hay de todo en botica, como diría el refranero popular. Y Kate Moss, por ejemplo, ha lucido en Ibiza un carísimo Kelly de Hermès… ¡como bolso de playa!
Kate Moss luce en Ibiza un Kelly de Hermès
https://twitter.com/PageSix/status/1953491815790723265
La supermodelo está de vacaciones en Ibiza con su hija Lila Ross y el novio de ella, Yoni Helbitz, con quien sale desde 2022. Los paparazzi los fotografiaron ayer disfrutando de una de las calas de la isla con looks veraniegos acordes al lugar.
Para ir a la playa utilizó un bikini de tiras color canela, un cinturón ancho negro y una blusa blanca transparente. A la que luego añadió una falda larga de raso para ir a comer a un restaurante. Y como complementos, Kate Moss lució dos larguísimas hileras de pulseras en los brazos, joyas de distintos estilos y, sorprendentemente, un Kelly de Hermès en la mano.
Se trata de un diseño clásico, de tamaño mediano y piel de becerro en color marrón. Lo llevaba cogido del asa superior dejando abierta la solapa y dejando ver su deterioro.
Ostentación del lujo
Sin embargo, no sorprende que justo ella haya elegido un bolso tan caro para ir a la playa pasando por alto que pueda estropearse por el agua del mar, la sal o el sol. Hace unos años dijo en una entrevista que se ponía un anillo de diamantes que le regaló Jade Jagger “porque los colores se ven preciosos en el agua”.
Algo como lo que debieron pensar Georgina Rodríguez o Dua Lipa al bañarse en el mar con joyas millonarias.
Desde luego y considerando no solo lo que valen, sino lo que cuesta comprar los modelos clásicos de Hermès, no volveremos a ver muchos en las playas.