Gran Canaria siempre es un buen lugar para escapar. Para dejar atrás las preocupaciones y encontrar ese equilibrio interior que tanta falta nos hace. Si además buscas buen tiempo, un trato de lujo, un paisaje diferente y poder perderte en siete piscinas… el Salobre Hotel Golf & Serenity es una elección perfecta. Un rincón maravilloso en Gran Canaria donde además de cuidarte en su spa con un entrenador personal, podrás dar clases de golf y degustar cada noche una cena temática con platos para todos los públicos, niños, pequeños, veganos, amantes de la carne o el marisco y sobre todo, del dulce.
Seguro que cuando llegues pensarás que estás en un laberinto, pero en cuanto lleves unas horas en el hotel, te sentirás como en casa y a una temperatura de cine. Los niños se volverán locos jugando a encontrar nuevos rincones, y vaya si lo harán, sobre todo en las suites. Tienen una terraza maravillosa para poder disfrutar de la naturaleza, cómodos asientos, mesa y sillas para trabajar tanto en el interior como en el exterior, posibilidad de descubrir multitud de animales junto a los niños… un paraíso. Y en el interior, baños realmente amplios con la ducha separada, una grandísima bañera… Es genial tener una cama inmensa, un armario a modo de vestidor y cómodas butacas para reposar. El hotel cuenta con 313 habitaciones y suites, todas con balcón privado y vistas a las montañas o al océano y los campos de golf.
Leíste bien, siete piscinas. Una escondida, varias sólo para adultos y una en la zona wellness que durante varias horas admite niños y está calentita. Es como un paraíso para ellos, ver y poder disfrutar de tanta agua. Hay una piscina escondida, no desvelaremos nada y serás tú el que la tenga que encontrar… las mejores fotos para redes sociales se hacen ahí. Si buscas una puesta de sol de infarto, la tienes en la zona más alta, rodeada de olivos y con camas balinesas. Podrás pedir cócteles sin parar e incluso bañarte en la piscina con ellos. El relax existe y está ahí. Todas con intimidad si es lo que te apetece en ese momento único.
The S Club, Sidecar, La Palmera… el hotel tiene varias propuestas de gastronomía que cuentan con opciones para todos los gustos, desde platos informales o hamburguesas, pasando por supuesto por el pescado local y las típicas patatas con mojo, hasta la comida más internacional. Si os gustan los cócteles tenéis una carta muy amplia con la que disfrutaréis (probad los que llevan aloe vera o los clásicos de toda la vida), mientras la música en directo os permite soñar con una escapada de otoño perfecta.
Por supuesto, el golf es referente en este hotel. Profesionales, amateurs, turistas de todos los países recurren a sus campos de golf para disfrutar y mejorar sus handicaps. Cuenta con tecnología desde el minuto uno para mejorar el tiro, la posición, el estilo… Y además del golf, hay rutas preparadas para hacer trekking, salir a correr o hacer yoga, todas con monitor si necesitáis.
Y el spa. Un retiro especial donde el rey de todos los tratamientos es el masaje canario; más de 60 minutos de desconexión absoluta donde rendir tributo a los productos y aromas locales. Y si buscáis rejuvenecer como sea, acudir a su sala de oxígeno puro concentrado al 99%, un tratamiento que muchos deportistas de primer nivel utilizan siempre y que te puede ayudar a recuperarte de diversas lesiones.
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