Luz Gabás: “Hace mucho tiempo que no sueño. Debo estar en paz”

Palmeras en la nieve fue su primera novela y tal fue el éxito que posicionó a Luz Gabás al status de escritora best seller. La historia fue llevada a la gran pantalla, llegando a conseguir dos premios Goya en la edición de 2016.

A partir de ese momento, su vida no fue la misma, logrando en 2022 el premio Planeta por Lejos de Luisiana. Atrás quedaba su etapa como profesora universitaria y alcaldesa de Benasque. Luz se centró en la literatura y empezó a sumar como éxito cada uno de sus libros.

El último, ya en librerías, es Corazón de oro. Su autora lo describe como “una gran aventura en un contexto fascinante, con unos personajes inolvidables y una hermosa historia de amor”. Poco más que añadir…

The Luxonomist: ¿Qué te ha dado la literatura que no conseguiste encontrar en otra actividad de la vida?

Luz Gabás: La posibilidad de aunar en una misma ocupación todas mis inquietudes creativas y reflexiones.

“Escribir es un estilo de vida que exige tiempo en soledad”

TL: ¿En algún momento la escritora ha añorado a la profesora de universidad?

Luz Gabás: Echo de menos el contacto con los jóvenes, que siempre te mantienen al día, y el café y las conversaciones con los compañeros. Escribir es una tarea muy solitaria. Pero soy de esas personas que, una vez tomada la decisión, no mira atrás.

TL: Tu primera novela, Palmeras en la nieve, se convirtió en un fenómeno de crítica y ventas. Se llevó al cine y consiguió dos premios Goya. ¿Superar eso era el reto?

Luz Gabás: Nunca lo vi como un reto a superar sino como una oportunidad que me daba la vida para seguir escribiendo.

TL: Tus siguientes novelas, Regreso a tu piel, Como fuego en el hielo, El latido de la tierra te consolidan como una de las grandes autoras de hoy. Con Lejos de Luisiana consigues el Premio Planeta y ya está en las librerías Corazón de Oro ¿En el mejor de tus sueños imaginaste todo esto?

LG: En el mejor de mis sueños me imaginaba siendo escritora. Lo soñé y se hizo realidad. Me lo recuerdo con frecuencia para reiterar el profundo agradecimiento que siento hacia mi editorial y mis lectores.

TL: ¿Escribir es un estilo de vida o una hace que se convierta en eso?

LG: Es un estilo de vida que exige saber pasar mucho tiempo en soledad, organizarte bien para que te cunda el tiempo, estar preparada para viajar y hablar en público, leer mucho y no perder la perspectiva de quién eres.

“Confío en que la mejor historia esté por llegar”

TL: ¿Escribir te ha permitido encontrar tu lugar en el mundo?

LG: De alguna manera, sí. Me gusta estar entre libros y cuadernos. Y me hace feliz proporcionar momentos de felicidad a otros.

TL: Cuando se edita un libro deja de ser del autor y se convierte en propiedad del lector. ¿Ha habido algún momento en el que dudaste compartir alguna de tus historias después de haberla escrito?

LG: Soy muy concienzuda. Pienso mucho una historia antes de convertirla en novela y no la doy por terminada hasta que todas las dudas se han disipado. No me ha pasado lo que me preguntas, la verdad.

TL: ¿El peor crítico está en casa?

LG: Afortunadamente, no. Nadie de mi familia lee la novela hasta que está publicada y, si han pensado algo negativo, lo han callado.

TL: ¿Eres escritora amante de socializar o, por el contrario, necesitas la calma y la soledad para escribir?

LG: El momento de concluir una novela requiere de concentración absoluta, por lo que reduzco la socialización. Pero en general soy muy sociable. Me gusta el contacto con la gente y la conversación.

“Me gusta estar entre libros y cuadernos y dar momentos de felicidad a otros”

TL: ¿La mejor historia está por llegar?

LG: Confío en que sí. La experiencia y la madurez dan más perspectiva.

TL: Corazón de oro es tu última novela. ¿Qué van a encontrar en ella tus millones de incondicionales?

LG: Es una gran aventura en un contexto fascinante, con unos personajes inolvidables y una hermosa historia de amor.

TL: ¿A quién no le dedicarías ni un minuto de tu vida?

LG: A los agresivos.

TL: ¿Ese olor inolvidable que te transporta a la infancia?

LG: La leña quemada en el hogar, el chocolate a la piedra y el caldo casero.

TL: ¿Hay un sueño que se repite una y otra vez?

LG: Hace mucho tiempo que no sueño. Debo de estar en paz.

“Me gusta Clint Eastwood como director”

TL: Tres palabras que definan el momento que está viviendo.

LG: Expectación, decisión, paciencia.

TL: Imagínate que te piden que tu vida sea tu próximo libro ¿Cómo lo titularías?

LG: Río arriba. Algo así como nadar contracorriente, pero con la vista siempre hacia el origen.

TL: Y si se llevara al cine… ¿quién dirigiría la película?

LG: Sinceramente, no creo que mi vida sea para una película. Por no eludir la pregunta, me ha gustado mucho Clint Eastwood como director. Resalto Gran Torino.

TL: ¿Lo mejor que te gustaría escuchar de ti?

LG: Que conservó la sonrisa.

TL: Si pudieras hacerlo, ¿qué le dirías a la niña que se quedó atrás?

LG: Que nunca pierda el entusiasmo.

TL: Hay una inundación en tu casa y hay que salir “ipso facto”. ¿Qué es lo que primero que coges?

LG: El bolso y algo de abrigo. Soy muy práctica.

TL: ¿Esa situación o persona que te ha dejado sin palabras?

LG: Una conferencia de Emilio Lara sobre Emilia Pardo Bazán en un curso de verano de la Complutense. Recibió una larga y merecida ovación. Hay que saber mucho para hablar así, sin leer una sola línea, sin notas y manteniendo el interés de la audiencia.

TL: ¿Algo que siempre dicen sobre ti y que no es cierto?

LG: Que soy seria.

TL: ¿Un miedo que no sepas controlar?

LG: El miedo al avión. Me tomo pastillas…