Ideas y productos para bordar el picnic perfecto

El verano es un tiempo estupendo para hacer planes al aire libre. Quedadas a la orilla del mar, en jardines con piscina, con vistas a la montaña o con acceso a la vera de ese río que tanto te gusta porque siempre está vacío. Todos son buenos si los haces con la compañía adecuada. Y pueden alcanzar el adjetivo de “perfectos” si los aliñas con algo rico para comer. Las posibilidades para hacer un buen picnic resultan abrumadoras pero hay varios productos que tienes que tener en cuenta sí o sí.

Jamón Monte Nevado y frutas de temporada

En primer lugar el jamón, porque no hay degustación que no eleve unos puntos su categoría si incluye un buen jamón. La gente de Monte Nevado ha demostrado con sus Maridajes Inesperados que no hay nada que no case bien con sus productos. Vinos naranjas, panes de obrador, cócteles de autor o ¡incluso sake! Y por supuesto productos “del día a día” que todos tenemos en la nevera.

Y es que su propuesta para este verano es acompañar sus mejores jamones con frutas de temporada como los arándanos, los lichis o las cerezas. Alimentos con sabores frescos y delicados que “revelan nuevos matices del Jamón de Bellota 100% ibérico, Mangalica y Serrano 24 cuando se combinan entre ellos“. Apuntado queda.

Sabores de siempre para un picnic perfecto

Además del jamón, no es descabellado para un picnic llevar algún otro embutido ibérico. Unos picos de pan, una tortilla de patata y una tabla para servirlos pueden sacar de un apuro a cualquiera. Así que si te ha pillado el toro y quieres un “todo en uno” el kit que propone Ibéricos Montellano puede sacarte de un apuro.

Incluye cuatro loncheados de ibéricos (jamón, lomo, chorizo y salchichón) en una caja diseñada por la ilustradora Inés Pérez en el que destaca el color verde de la dehesa salmantina.

Vinos frescos para bordar un picnic de altura

Tenemos la parte salada, la parte dulce… y nos queda la parte líquida para que nuestro picnic de verano sea perfecto. En este caso vamos a proponer varios vinos especialmente frescos y versátiles, que maridan perfectamente con el sabor de los ibéricos.

En cuanto a blancos, sorprende realmente Tío Pepe en Rama 2025 de González Byass, un vino que no tiene nada que ver con lo que esperas de un Tío Pepe de Jerez. Es un vino fino de alta expresión para degustar lentamente. Y para quien prefiera el verdejo, el último lanzamiento de Ramón Bilbao de edición limitada, Early Harvest, es suave, con baja graduación y visualmente chulísimo.

Con un precio más ajustado, dos rosados. Por un lado Flor Innata, de Valdecuevas; y por otro Doña Isabella con DO Navarra. Son dos vinos muy distintos y a la vez fáciles de beber de los que te acordarás para el siguiente verano.