Roberto Brasero: “Sin mi pareja, la paternidad me agobiaría más que la apnea”
Parece que la experiencia de escribir le ha creado adicción, porque le hubiera gustado que le preguntara: “¿Para cuándo tu próximo libro?”. Y es que Roberto Brasero es inquieto por naturaleza, “un defecto, si no paras quiero delante de la cámara, y una virtud para la vida”. Cuando aún no se ha difuminado el eco de su participación en El desafío, llega a las librerías su Pequeña historia del clima, donde demuestra una de sus mayores habilidades: explicar bien las cosas…
The Luxonomist: No sorprende que tu propuesta literaria sea básicamente didáctica. ¿Es lo que pretendes con Pequeña historia del clima?
Roberto Brasero: ¡Sí! Que sea didáctica y entretenida, que pases un buen rato leyéndolo y además aprendas algo… ¡o viceversa!
TL: ¿La inquietud que te identifica es una virtud o un defecto?
Roberto Brasero: Un defecto si no paras quieto delante de la cámara, pero una virtud para la vida.
TL: ¿Recuerdas ese momento en el que empiezas a amar la meteorología?
Roberto Brasero: Me ocurre cada día…
TL: De Mariano Medina, el primer hombre del tiempo, a Roberto Brasero. De información residual al terminar el Telediario a un auténtico protagonismo. ¿Qué lectura haces de este cambio “climatológico”?
Roberto Brasero: Mariano Medina, como pionero que fue, tuvo una gran repercusión. Luego la información del tiempo siempre iba al final del informativo y no salía de su reducto. Ese creo que ha sido el cambio fundamental: ahora una previsión puede ser una noticia de apertura. ¿Qué lectura hago? Pues me encanta haber sido parte de este cambio aportando, quizá, visión periodística al ámbito meteorológico.
“Que no se cumpla un pronóstico da mucha, pero que mucha rabia”
TL: ¿Hay algo que te dé más rabia que no acertar en una predicción del tiempo?
RB: Muchas cosas: la injusticia, el aprovechamiento de los débiles, el triunfo de los fanfarrones… y sí, a veces que no se cumpla un pronóstico da mucha, pero que mucha rabia.
TL: ¿Has descubierto a un Roberto diferente tras tu paso por El desafío?
RB: Yo creo que he sido el mismo… pero es cierto que mucha más gente me ha podido ver como soy, porque en el tiempo no da tiempo, sobre todo ahora que dura poquito. Al menos eso me dicen muchos fans que me han salido a raíz del programa. Gracias a todos.
TL: ¿Hay un reto más difícil que ser padre de cuatro hijos?
RB: Ese sí es un desafío, pero en mi caso tengo una gran coach para esta prueba: mi pareja, y eso te da una gran confianza. Sin ella esto de la paternidad me agobiaría más que la apnea.
TL: ¿Lo mejor que se te da hacer?
RB: Explicar cosas.
TL: ¿Qué te pone de buen humor?
RB: Una sonrisa de los demás.
TL: Esa canción que, cuando la escuchas, se te mueven los pies sin remisión.
RB: Con Ca plane pour moi de Plastic Bertrand. Es imposible no ponerte a saltar… o con cualquiera de Los Flechazos.
“Me encanta aportar una visión periodística al ámbito meteorológico”
TL: ¿En qué eras brillante en el colegio?
RB: En todo menos en manualidades, si te soy sincero.
TL: Esa obra de arte que te gustaría tener expuesta en casa.
RB: El matrimonio Arnolfini, de Jean van Eyk, quedaría bien en mi salón. Además tengo un espejo parecido.
TL: ¿Un talento que se te resiste por mucho que lo intentes?
RB: También te soy sincero: cantar bien.
TL: ¿Eres de una mentira piadosa a tiempo?
RB: Digamos que evito verdades que puedan hacer daño.
TL: ¿Cuál es la compañía perfecta para irte de fiesta?
RB: Amigos, amigos, amigos.
TL: ¿Esa palabra que nunca regateas y más usas?
RB: Gracias.
“Vivir en pareja nos aporta el valor de la comprensión”
TL: ¿Qué ves cuando te miras al espejo?
RB: Alguien que cuenta el tiempo y no puede evitar que vaya pasando por él…
TL: ¿Ese bien que más valoras?
RB: El tiempo (el de los minutos).
TL: ¿La enseñanza que nos deja vivir en pareja?
RB: El valor de la comprensión.
TL: ¿Tu mayor decepción?
RB: Algunas personas que, precisamente por eso, ya ni recuerdo quiénes son.
TL: ¿Hay alguna situación en la vida en la que, por algo, te pones pesado?
RB: Cuando veo que llega un cambio de tiempo. Cuando creo que viene un frío que te puede pillar en bañador o al revés… Creo que, en ocasiones, he llegado a ponerme pesado contándoselo a cualquiera con el que me cruzase.
TL: Una película en la que te gustaría quedarte a vivir…
RB: Atrapado en el tiempo, jejejeje
TL: Esa experiencia gastronómica inolvidable…
RB: Reencontrarte con los sabores de la cocina de mi madre. El otro día me pasó con unos huevos rellenos que hizo mi hermana.
TL: La pregunta que no te he hecho y te habría gustado responder.
RB: ¿Para cuándo tu próximo libro?