El príncipe Harry vuelve a Londres pero no verá a su familia
El príncipe Harry no se niega a sufragar el coste de los gastos policiales mientras él o su familia se encuentren en suelo británico.
El príncipe Harry se encuentra en Londres. Un viaje del que no se tenía noticia previa y que está relacionado con las batallas judiciales que aún mantiene abiertas en su tierra natal. En concreto, el duque de Sussex habría regresado para atender las novedades de la demanda que abrió contra el ministerio del Interior hace unos años.
El príncipe Harry no se niega a sufragar el coste de los gastos policiales mientras él o su familia se encuentren en suelo británico. Pero exige, como miembro de la familia real, que sea la policía metropolitana la que se encargue de ello. Así, Harry está en Londres para apelar un fallo sobre si tiene derecho a tener guardaespaldas armados pagados por el contribuyente.
La seguridad es una obsesión para Harry
La seguridad privada es un tema casi obsesivo en la vida del príncipe Harry. Los sucesos acontecidos antes, durante y después del fallecimiento de su madre, la princesa Diana, relacionados con la presión mediática que vivió, condicionan este aspecto de su vida.
Lo vimos en mayo de 2023, cuando él, su esposa Meghan Markle y su suegra fueron perseguidos por varios paparazzi en las calles de Nueva York. Un turbio suceso que no hizo más que aumentar sus miedos.
La revista Forbes estimaba al año de recalar en California, que la seguridad privada de la pareja durante las 24 horas del día en su residencia de Montecito podría costarle a la pareja entre 2 y 3 millones de dólares al año.
Sólo el tiempo que la pareja estuvo refugiada en Canadá, entre finales de 2019 y abril de 2020, su seguridad le costó unos 300.000 dólares al contribuyente canadiense. Cifras que reflejan que este asunto es muy probablemente el principal entuerto económico al que se enfrenta la pareja desde hace tiempo.
El príncipe Harry no se verá con Carlos III en Londres
En cualquier caso, este viaje fugaz a Londres será solitario para el príncipe Harry. Entendemos que no verá a su hermano ni a su cuñada por su tensa relación desde hace tiempo, pero tampoco a su padre. Su estancia en la capital coincide con el viaje que Carlos III y su esposa Camilla han emprendido a Italia.
Una visita oficial de tres días en la que ambos tenían previsto visitar al Papa en el Vaticano, recién salido del hospital tras superar una neumonía bilateral. Esta simboliza los esfuerzos por estrechar lazos entre la Iglesia Católica y la Iglesia Anglicana, de la que Carlos III es su máximo representante.