Mandarin Hotels quiere crecer en Rusia

Rusia ha cambiado significativamente en las últimas dos décadas. Es un país más moderno, desarrollado, aunque se ha visto afectado por crisis tanto económicas como políticas, que han acarreado sanciones por parte de la comunidad internacional perjudicando, en última instancia, a la mayoría de su ciudadanía. El sector turístico en general y el hotelero en particular es de los que más han evolucionado. La oferta hotelera a finales de siglo pasado era muy limitada, con establecimientos caros, heredados de la época soviética y con poca oferta.

Pongo el ejemplo de la ciudad de Gátchina a la que acudo regularmente por motivos de trabajo. Allá por 1995 el único establecimiento de esta ciudad de 70 mil habitantes, situada a 35 Km de San Petersburgo, con bastantes lugares de interés turístico, era el hotel Akademicheskaya perteneciente al complejo del Instituto de Física Nuclear de Leningrado.

Un vestigio claro de la época comunista, cuyo último piso estaba clausurado por temor a que pudieran desde allí espiar las instalaciones del Instituto. A principios del siglo XXI apareció el Hackel, un hotel más moderno pero de precios desorbitados. Poco después abrieron una serie de hoteles similares al Hackel- qué buena es la competencia- pero con precios más reducidos y mejor servicio. La ciudad cuenta en la actualidad con unos 6 o 7  establecimientos de tres estrellas a un precio de entre 40-50 euros.

Un gran complejo hotelero para 2021
La transformación del sector en las grandes ciudades como Moscú y San Petersburgo ha sido mucho mayor. La oferta en ambas ciudades es enorme; desde un hostal compartido hasta los hoteles más lujosos del mundo. De uno de ellos nos vamos a ocupar en el presente artículo dado que Mandarin Hotel Group ha firmado un contrato de gestión para un nuevo hotel y residencias de alta gama en Moscú, cuya inauguración está prevista para 2021.

El nuevo Mandarin Oriental -Moscú tendrá una ubicación privilegiada frente al Kremlin y contará con 65 habitaciones y suites, dos restaurantes, un lounge bar e instalaciones de spa y wellness que incluyen una piscina cubierta de 25 metros. El proyecto albergará además 137 Residencias Mandarin Oriental, que se convertirán en el primer desarrollo residencial de lujo de la marca en Moscú.

Mandarin Oriental Hotel Group es propietario y gestor de algunos de los hoteles, residencias y complejos más exclusivos del mundo. Partiendo de sus orígenes asiáticos hasta convertirse en una marca global, el grupo actualmente opera 31 hoteles y 7 residencias en 21 países. Cada propiedad combina la herencia oriental de esta empresa con la esencia genuina del lugar donde se ubica. Mandarin Oriental Hotel Group dispone de una importante cartera de hoteles y residencias en fase de desarrollo.

Expansión en los mercados emergentes
De hecho, en los últimos 12 meses, la compañía anunció 10 nuevos proyectos en todo el mundo, lo que eleva la cartera total a 31 hoteles operativos y otros 17 en construcción. En 2017, se añadieron dos nuevas propiedades que serán renombradas como hoteles Mandarin Oriental este año.

El hotel Santiago, en Chile, su primera propiedad en América del Sur, y el Pink Sands Club es su primer resort caribeño, situado en concreto en San Vicente y las Granadinas. Además, han añadido en Pekín dos nuevos hoteles de concepto muy original, basado en los enclaves tradicionales de la ciudad,  los hutong o callejuelas reconstruidas para formar lujosos establecimientos.

La expansión más inminente está enfocada hacia Oriente Medio en 2019, en la playa de Jumeirah en Dubai, con Mandarin Oriental, Doha que abrirá poco después. También han anunciado un segundo hotel y residencias en el corazón del distrito de Mayfair de Londres.

Reconstrucción del Ritz, emblemático hotel madrileño
La compañía adquirió, junto al grupo inversor árabe Olayan, el madrileño Hotel Ritz en 2015 por un montante de 130 millones de euros. Además, están acometiendo una reconstrucción presupuestada en 100 millones de euros sobre un establecimiento que acaba de cumplir 108 años y cuya reapertura está prevista en 2019. Unas obras que sin embargo se han visto ralentizadas por un trágico accidente que le costó la vida a un trabajador y causó 11 heridos de diversa consideración.

Previamente, la cadena había nombrado director del Ritz al directivo francés Gérard Sintès, que también fue en su día, director del Mandarin Oriental de Barcelona durante cuatro años y que asumirá ahora el proyecto de renovación y cambio de marca del icónico hotel madrileño. Como vicepresidente del Área de Operaciones, además supervisará la propiedad del grupo en Barcelona.

Mandarin Hotel Group, como una de las cadenas hoteleras más valorada y con más reconocimientos (sus restaurantes acumulan un total de 24 estrellas Michelin y el grupo cuenta con 12 spas de 5 estrellas Forbes) centra su estrategia en considerar que el verdadero lujo reside en crear hoteles legendarios a través de la combinación perfecta de tradición, calidad e innovación.