(Foto: Beach Soul)
Pocas experiencias existen tan placenteras como un día de playa. Disfrutar de las olas del mar, el sol, con amigos, familia o en soledad. La inmensidad del mar es capaz de eliminar cualquier problema que nos aceche. La letanía sonora del rompeolas es la medicina que toda persona necesita. Una vez acabada la jornada es el momento de volver a casa y es cuando un día feliz se topa de bruces con la realidad más incómoda.
La que hasta el momento de recoger era arena cómoda ahora se torna molesta pegada a nuestro cuerpo haciendo equipo con la sal reseca. Sólo una buena ducha podría hacer más placentero el camino de vuelta al hogar. Tenemos la solución, hemos ido a la playa y hemos puesto a prueba un dispositivo que logra que todo el día sea perfecto hasta el final.
El invento se llama Jamigan, Skully, Original, Ocean Rise o Bliss Out. Son diferentes nombres para un mismo aparato. Se trata de una ducha portátil creada por una empresa australiana llamada Beach Soul. Está claro que en Australia saben de hacer vida en la playa. Cada nombre de la ducha está relacionado con el acabado exterior de la misma.
En nuestro caso hemos probado la Jamigan de ocho litros de capacidad y con un dibujo exterior diseñado por el artista indígena Zachary Bennett-Brook. Se trata de algo muy sencillo de imaginar, una ducha portátil, pero llevado a un nivel de acabados y facilidad de uso realmente alucinante.
Con unos sencillos pasos conseguimos una ducha única. Mediante su bomba de presión manual el agua se presuriza y logramos que el agua salga con la presión necesaria.
Esta ducha Jamigan, de Beach Soul, es ideal para llevarla con nosotros en el coche para acabar un día de playa de la mejor manera, para sacar más partido a nuestro equipamiento de camping o simplemente como apoyo higiénico allá donde nos desplacemos.
Su manguera alcanza más de dos metros una vez que la hemos extendido y en su cabezal podemos seleccionar hasta diez modos distintos de expulsar el agua.
Limpiar nuestro cuerpo, la tabla de surf e incluso las ventanas del coche no puede ser más sencillo. Su cómoda asa de transporte también nos sirve para bombear la presión al interior. Al terminar de usarla liberamos la presión mediante su válvula de seguridad. Todos los elementos están construidos con plástico de alta calidad libre de BPA.
Dependiendo del modo que seleccionemos en el cabezal de nuestra Jamigan podemos conseguir hasta cinco minutos de ducha continua. La funda de neopreno conservará la temperatura a la que introduzcamos el agua en su depósito y permanecerá libre de bacterias.
Beach Soul piensa en el medioambiente y por cada compra plantará un árbol. Si ocho litros son demasiados podemos optar por los modelos con capacidad de cinco litros.
Estos últimos tienen un precio de 129 euros, los modelos de mayor tamaño, sin importar el dibujo que más nos guste, cuestan 139 euros. Tener una ducha portátil, que funciona de maravilla y con una facilidad de uso pasmosa ahora es posible. Cualquiera de nuestras escapadas terminará bien gracias a una ducha que viaja con nosotros.
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