Foto: Gtres
En un momento en el que lo vintage está en auge, María Grazia Chiuri se ha sumergido en los archivos de Dior para traer de vuelta la que, posiblemente, sea la prenda más icónica de la firma. Hablamos de la camiseta J’adore Dior, una prenda de algodón que volvió locos a los seguidores de la firma en los primeros años de los 2000, y cuya nota distintiva era el logo de la firma. Y es que parece que la logomanía está de vuelta en el lujo, pues para muchas firmas es una apuesta segura de éxito.
Para hablar de la camiseta J’adore Dior tenemos que remontarnos hasta finales de los 90 y primeros de los 2000 cuando John Galliano era director creativo de Dior.
Él decidió darle una nueva vida al icónico logo de la firma y presentó en la colección primavera/verano 2001 unas sencillas camisetas de algodón en las que se podía leer J’adore Dior. Las lanzó junto al perfume que lleva su mismo nombre, volviendo locos a los fanáticos de Dior.
Y es que en los primeros años de los 2000 llevar una prenda con el logo de una firma de lujo era un símbolo de estatus. Casas como Gucci, Louis Vuitton o Dior recuperaron la logomanía que tan de moda estuvo en los 80, llenado sus prendas y accesorios con sus logos.
Sin embargo, se exageró tanto que terminó cansando al público, y en 2010 la tendencia giró hacia un lujo más discreto y con menos logos. Las firmas se refinaron y, aunque no olvidaron sus estampados monogram, los hicieron menos protagonistas en sus colecciones.
Tras una época vacía de logos, en 2016, María Grazia Chiuri decidió recatar el J’adore Dior de Galliano aunque de una forma discreta. Lo usó como una forma de identificar la marca ante las nuevas generaciones y crear su propia seña de identidad dentro de una firma a la que acababa de llegar.
Ahora, con su puesto más que consolidado, la diseñadora ha apostado por el maximalismo rescatando la icónica camiseta J’adore Dior de Galliano. Fue la gran sorpresa del desfile de la colección otoño-invierno 2025-2026 de la Semana de la Moda de París.
En concreto, la diseñadora presentó dos modelos en color gris con las letras en blanco. Las mostró con una estola de piel encima, una gabardina o incluso un corsé. Y a una de ellas le añadió unos encajes rotos en la zona del hombro y la cintura.
Se espera que estén a la venta a partir de verano y todo apunta a que serán un superventas. Y es que desde que las camisetas vieran la luz en el desfile, los modelos originales de Galliano aumentaron su precio en webs de segunda mano, llegando a superar los 2.000 euros en Fartfetch.
Y es que apostar por el logo parece que es una apuesta segura para conseguir ventas. Así lo ha demostrado también JW Anderson en Loewe. Tan solo nueve meses después de llegar a la dirección creativa modificó el logo y dio una nueva imagen a la firma, convirtiéndole en parte esencial de sus colecciones.
Así lo hemos visto en el famoso tank top que tan de moda se puso el año pasado, una simple camiseta blanca de tirantes en el que el protagonista era el bordado del logo de la firma que tenía en el centro de pecho. De hecho, esta prenda fue el artículo de moda más deseado de 2022, según el índice Lyst.
Lo mismo pasó con el vaquero Anagram, un pantalón vaquero básico de pernera ancha que lleva bordado el logo de la firma en las rodillas. Otro superventas que conquistó a influencers y celebrities de todo el mundo.
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