(Fotos: Gtres)
Halcyon Days elabora productos esmaltados desde 1970. Una peculiar actividad que esta casa inglesa recuperó siendo fiel al legado que décadas antes se había hecho muy popular. A finales del siglo XIX eran habituales los talleres de esmaltado de cobre por todo Londres y alrededores. Producían objetos cotidianos que luego cayeron en desuso, como las polveras o las cajitas de rapé. Todo con una atractiva y cuidada estética.
Los conflictos armados de principios de siglo XX acabaron con el negocio y con buena parte de sus artesanos. Así que su producción cambió y se destinó entonces a la producción de objetos de primera necesidad, como sartenes o cazos, dejando la finura y el buen gusto para otras épocas.
Con 23 años, Susan Benjamin, creó Halcyon Days en 1950. En principio era una pequeña tienda en Avery Row que regentaba junto a su socia comercial, Gerda Bram. Un lugar diferente a todos en el Londres de posguerra. Porque allí sólo había cosas bonitas como objetos de arte de los siglos XVIII y XIX. Luego, Susan comenzó a diseñar. Y su primer éxito comercial fue un plumero con mango dorado y colas de visón.
En su afán por mejorar su oferta comercial, Susan Benjamin descubrió el mundo de las cajas esmaltadas a finales de los sesenta. Hizo varios encargos y aquel producto en desuso comenzó a venderse en su tienda con relativo interés. Fue un artículo en el Financial Times haciendo referencia a estas creaciones lo que desbordó todas las previsiones.
El interés llegó al Palacio de Buckingham y con distintos usos, la Reina Madre se puso en contacto con Halcyon Days para solicitar varias cajas esmaltadas. Diez años después, la firma recibía el prestigioso honor de ser proveedor oficial de los miembros más relevantes de la familia real. Las cajas esmaltadas de Halcyon Days se hicieron habituales entre los regalos a altos mandatarios. Por ejemplo, Gerald Ford se llevó la suya en 1976.
Dicen que entre Susan Benjamin e Isabel II siempre hubo una conexión especial. Ambas compartían sus experiencias como voluntarias durante la II Guerra Mundial cada vez que la primera era invitada a una recepción en palacio.
No es de extrañar por lo tanto que Halcyon Days tenga una especial sección de productos dedicados a la difunta reina y a otros miembros destacados de la casa. Las exclusivas ediciones limitadas son su especialidad y las que más se venden. Halcyon Days se vendió en 2001, pero Susan Benjamin continuó diseñando esmaltes especiales para la empresa. Lo hizo después de jubilarse hasta su fallecimiento en septiembre de 2010.
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