Se podría decir que a Meghan Markle, por el momento, en este viaje oficial solo se le ha resistido el mítico puente sobre la bahía de Sídney. Un recorrido que por precaución se desaconseja a las embarazadas y que ha disfrutado como un niño su marido. El Príncipe Harry ha seguido las indicaciones del personal de seguridad y se ha encaramado hasta lo alto de uno de los iconos turísticos de Australia para disfrutar de unas vistas espectaculares e izar la bandera de uno de sus proyectos estrella, los Juegos Invictus.
Horas antes, sí disfrutaron juntos de dos momentos muy diferentes, pero llenos de contenido social. Durante la visita a la escuela Macarthur Girls High School, Meghan Markle recordó sus inicios como estudiante y los retos que tuvo que pasar para alcanzar el sueño de ser actriz. Incluso habló de su primer empleo, en el que tuvo que sacar la basura muchas veces, como ejemplo de esfuerzo y superación.
Una visita para la que Meghan escogió un vestido en tonos azul marino de la firma Roksanda con escote halter y una abertura por debajo de la rodilla. La Duquesa de Sussex apostó de nuevo por unos tonos con los que se siente muy cómoda y segura.
La pareja comenzó la mañana con una visita a la mítica playa de Bondi donde participaron en una actividad muy especial. La asociación ‘One Wave’ está constituida por amantes del surf que intentan con su actividad deportiva luchar contra los prejuicios que acompañan a todo tipo de enfermedades mentales.
Meghan y Harry no dudaron un instante en unirse a una de las terapias que realizan en plena playa. Se enfundaron un collar de estilo hawaiano y Meghan sorprendió con un vestido de la firma australiana Martin Grant. Un look de algo más de mil euros que se ha agotado en minutos y que completó con accesorios de Adina Reyter.
El calzado escogido para la ocasión ha sido el detalle más comentado. Unas alpargatas con origen español, de una de las firmas más seguidas por la realeza europea. La marca española Castañer ha conseguido que Meghan Markle se calce unas alpargatas de cuña negras similares a las que han llevado Kate Middleton o la reina Letizia.
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