(Foto: Gtres)
La hija menor de los reyes ha seguido los pasos de su hermana mayor y ha vivido este jueves uno de los días más especiales de su vida. Al igual que sucedió con la princesa Leonor hace dos años, la infanta Sofía ha recibido el sacramento de la confirmación en la parroquia de Nuestra Señora de Aravaca.
Lo ha hecho junto a un grupo de compañeros del colegio Santa María de Los Rosales, donde termina sus estudios este año. Es la misma parroquia en la que ambas hermanas recibieron la primera comunión.
Un acto en el que ha estado arropada por sus padres, su hermana, sus abuelos maternos, Paloma Rocasolano y Jesús Ortiz, y la reina Sofía. El padre de doña Letizia ha acudido acompañado por su actual esposa, Ana Togores, que no ha posado en las fotografías.
De esta forma la cita ha contado con mucha más presencia familiar que el de la princesa Leonor. El motivo es que la confirmación de la heredera al trono se celebró en 2021, cuando todavía estaban vigentes las restricciones por la pandemia de Covid-19.
La infanta Sofía ha recibido su confirmación radiante, con un estiloso mono en un vibrante tono fucsia con detalle cut out en el abdomen. Una creación de la casa Cayro, llamada comercialmente Petunia, que se podía adquirir por algo menos de cien euros en su web.
Un look que recuerda mucho al que doña Letizia agregó a su vestidor el año pasado en un evento de la Cruz Roja y que responde al mismo estilo y la misma marca.
La infanta Sofía completó su atuendo con unos zapatos planos en tono nude y una cartera de mano a juego, de Mango, que forma parte del vestidor de la reina Letizia desde hace una década.
La hija menor de los reyes, la auténtica protagonista del evento, llevaba su larga melena suelta y un tenue maquillaje, acaparando todos los flashes durante el posado familiar previo a la ceremonia.
Un posado en el que su hermana, la princesa Leonor ha tenido un importante papel. La heredera ha sido la encargada de ir a buscar a la reina Sofía y a sus abuelos maternos, que se encontraban en un discreto segundo plano en la puerta de la iglesia.
De este modo se ha podido inmortalizar este momento familiar tan especial en el que tan solo ha faltado el rey Juan Carlos, que se encuentra en Abu Dabi. La infanta Sofía se ha situado entre la reina Emérita y su padre. Mientras que la princesa Leonor lo ha hecho entre su madre y sus abuelos maternos.
Todos han lucido atuendos en la misma gama cromática que la infanta Sofía. Hasta el rey Felipe VI ha escogido una corbata a juego. En cambio, Jesús Ortiz ha lucido una corbata verde.
La infanta Leonor llevaba un juvenil vestido floreado en tonos frambuesa de Polin et Moi y unas alpargatas de cuña azules. Pertenecen a su madre y son de Calzados Picón. Ha rescatado también del vestidor real un clutch de Narciso Rodríguez para Zara.
Doña Letizia ha rescatado unos pantalones tipo palazzo en blanco y un top de seda en rosa empolvado de Hugo Boss y ha escogido un calzado similar al de su hija mayor. Unas cuñas de esparto de Macarena Shoes que ha combinado con un bolso de Furla.
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