Foto: Gtres
Los reyes Felipe VI y Letizia han puesto rumbo a China en el que será su primer viaje de Estado al país. Desde mañana y hasta el próximo jueves visitarán Chengdú y Pekín con el objetivo de reforzar los lazos y las relaciones bilaterales entre ambos países.
Sin saber qué habrá metido doña Letizia en su maleta hoy recordamos algunos de los vestidos de inspiración oriental más bonitos de su vestidor y que, quién sabe, podría recuperar para este viaje.
Para mi gusto es uno los vestidos más bonitos que tiene la reina Letizia y está en el top 1 de los de inspiración oriental. Lo estrenó en los Premios Princesa de Asturias de 2017 y luego se lo hemos visto otro par de veces.
Es un diseño de Felipe Varela confeccionado en seda blanca con bordados de hilo negro con flores, garzas y el símbolo de la longevidad.
Es poco probable que la reina viaje con este diseño a China, porque lo estrenó precisamente cuando el presidente chino, Xi Jimping, y su mujer visitaron España en 2018. Igualmente no podemos dejar de meterlo en esta lista porque es de inspiración oriental y simplemente delicioso.
Se trata de un vestido de Asos Design que en su día tenía un precio cercano a los 100 euros. Elaborado en gasa rosa, su vínculo con Oriente radica en su estampado floral.
Otro de los vestidos de inspiración oriental que Letizia tiene en su vestidor desde hace tiempo es también uno de los más elegantes. Negro con flores doradas, silueta recta y largo midi, causó sensación cuando lo estrenó en diciembre de 2019 para la entrega del Premio Francisco Cerecedo.
La reina se lo puso también en la cena en honor del presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in, y su esposa, Kim Jung-sook, que visitaron nuestro país en junio de 2021.
Y otro de sus diseños del diseñador belga, retirado en marzo de 2024, es un traje con el que también podría rendir homenaje a Oriente durante su viaje.
Es un conjunto negro con pantalón pitillo y chaqueta con brocados florales, cuello mao, larga hasta la cadera y hombreras marcadas. Lo estrenó para la inauguración de la Torre Puig T2 en Barcelona y no se lo hemos vuelto a ver.
El último de los diseños orientales de los que hablamos hoy es otro que por motivos meteorológicos es difícil que le veamos puesto, pero nunca se sabe. Es un vestido primaveral, con forma de kimono y motivos florales en un favorecedor tono rosa que le hemos visto al menos en cuatro ocasiones.
Lo estrenó en 2018 y se lo puso por última vez este mismo verano.
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