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Hay tantos entrenamientos como corredores. Foto: intersport Leía estos días un artículo en Runners.es que trata sobre el entrenamiento para el maratón y cuanto de intenso debe ser, especialmente en el número de kilómetros. Evidentemente este tema da para más de una docena de posts, pero sí me gustaría comentar alguna experiencia que he tenido con los distintos entrenamientos que he seguido y cuáles me han funcionado mejor. El debate que muchos de los runners populares tenemos es cuántos kilómetros hay que hacer a la semana y especialmente cuantos kilómetros (o tiempo) hacemos en la tirada larga semanal. Supongo que hay tantos entrenamientos como entrenadores y que a cada uno le viene mejor uno u otro, pero creo que lo importante es variar alguna vez para ver cuál es el que mejor se adapta a nuestras características y capacidades como corredor. Se pueden hacer entrenamientos suaves o fuertes Yo he seguido varios entrenamientos a lo largo de los últimos 10 años en los que he estado corriendo maratones y creo que en ellos he tenido ambos extremos, desde el entrenamiento con mucha carga de días a la semana y enormes tiradas largas hasta los entrenamientos más suaves con poca carga de kilómetros, pero tratando de que sean de más calidad. Empecé por los primeros, entrenando cinco días a la semana y haciendo tiradas muy largas los fines de semana. Creo que al tener poco conocimiento de cómo se hacía pensaba que cuanto más entrenamiento, cuantos más kilómetros, mejor y, sobre todo, pensaba que si no podía llegar decentemente o a los 30 km y pico no sería capaz de llegar a los 42,195. Pues bien, después de varios años corriendo, lo que claramente me da mejores resultados es hacer menos carga de días, menos kilómetros pero de más calidad y complementando con ejercicios específicos y pesas, estas últimas especialmente al principio del entrenamiento. Ahora entreno cuatro días a la semana y las tiradas largas nunca llegan a las dos horas. Eso sí, hago más series, las tiradas largas son progresivas en velocidad y complemento con ejercicios de tobillos, abdominales y pesas. Todo ello hay que adaptarlo evidentemente además a la marca que queramos conseguir, pero en mi opinión esta estructura funciona bastante bien para los que andamos sobre las 3:30 horas y ya estamos talluditos, por lo que las mejoras en los tiempos ya no son excesivamente grandes. El descanso del corredor. Foto. vitonica En cuanto a las tiradas largas, me da la sensación que cuando uno entrena para su primer maratón el hacer tiradas de alrededor de 30km es más algo psicológico para saber si será capaz de llegar a la meta como decía antes, pero el desgaste físico que conlleva es muy grande. Muchas veces nos olvidamos de una parte fundamental del entrenamiento: el descanso. Cuanto más y mejor se descanse durante el entrenamiento del maratón, mejor. Yo alguna vez incluso no he corrido nada, absolutamente nada, la semana antes del maratón para descansar bien y me ha dado muy buenos resultados. Ahora me he acostumbrado a correr un par de días a “trote cochinero” durante esa semana, solo para activar las piernas y también me ha funcionado muy bien. Pero como siempre, sobre gustos colores.

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