Champagne en tres actos: historia, terroir y nuevas experiencias enoturísticas
Un recorrido por Hautvillers, vignerons familiares, grandes maisons y los nuevos espacios que están redefiniendo la identidad cultural y enoturística de la Champagne.
Situado en el corazón de la región de Champagne y rodeado de viñedos declarados Patrimonio Mundial por la UNESCO, Hautvillers es uno de esos pueblos que condensan historia, tradición y paisaje. En su abadía, fundada en el año 650, el monje Dom Pérignon, considerado el padre espiritual del champagne, revolucionó la elaboración del vino espumoso y contribuyó decisivamente al prestigio internacional de la región.
La Abadía Saint-Pierre d’Hautvillers, hoy propiedad privada de Moët & Chandon, permanece cerrada al público por obras, pero su legado impregna cada rincón del pueblo. Calles serpenteadas, fachadas decoradas con más de 140 enseñas de hierro forjado y un entorno natural privilegiado entre colinas, viñedos y miradores.
Hautvillers y Dom Pérignon: cuna del champagne
Quedé fascinada particularmente por esas enseñas de hierro, ya que son uno de los símbolos más singulares del pueblo. Su origen se remonta a la Edad Media, cuando estos letreros servían para identificar casas y oficios en una época en la que gran parte de la población era analfabeta.
Con el tiempo, la tradición evolucionó hacia piezas artesanales que representan herramientas vitícolas, racimos de uva, toneles y motivos ligados al vino, convirtiéndose en un verdadero lenguaje visual del champagne.
Hoy, estas enseñas forman un patrimonio estético e histórico que guía al visitante por las calles del pueblo y mantiene viva la memoria de sus antiguos vignerons, reforzando la identidad cultural de la cuna del champagne.
Tradición familiar champenoise con más de tres siglos
La ruta nos lleva ahora a Rilly-la-Montagne (Marne), en pleno corazón de la Montagne de Reims, para visitar un pequeño vigneron: Champagne Yves Couvreur. Allí me recibe el propio Yves, heredero de una tradición vitícola que se remonta a 1644. Su explotación reúne seis hectáreas y media repartidas en 35 parcelas situadas en tres pueblos clasificados como Premier Cru.
En estos viñedos cultiva las tres variedades emblemáticas de Champagne: Pinot Noir, Chardonnay y Pinot Meunier, destinadas tanto a cuvées de mezcla como a elaboraciones monovarietales.
Sus champagnes destacan por ensamblajes precisos y una filosofía de trabajo profundamente respetuosa con el entorno. La certificación HVE (Haute Valeur Environnementale), obtenida en 2014, acredita un manejo sostenible del viñedo, la preservación de la biodiversidad y una intervención mínima en el suelo.
Su estilo apuesta por vendimias en plena madurez, buscando expresar la mineralidad propia del terroir y un carácter auténtico que refleja su identidad artesanal.
Champagne G.H. Martel & Co, historia y legado
Fundada en 1869 en la Avenue de Champagne de Épernay, G.H. Martel & Co encarna la elegancia clásica y el saber hacer histórico de la región. Hoy, desde Reims, la maison custodia un patrimonio enológico que se siente casi sagrado.
Junto a Louis, el historiador jefe descendimos a sus crayères medievales que son esas galerías excavadas entre los siglos IV y XV. Bajamos hasta 22 metros de profundidad y fue como adentrarse en el vientre ancestral de la región, un silencio frío, mineral, donde el tiempo se desacelera y todo adquiere otra dimensión.
Allí, donde las paredes respiran historia, uno entiende por qué sus champagnes tienen un carácter tan preciso y reconocible.
El espíritu familiar se percibe en cada detalle. Las herramientas y máquinas antiguas conservadas en la bodega no son simples objetos. Son huellas de manos que trabajaron la tierra con paciencia y rigor, generación tras generación.
Bajo la dirección del Grupo Rapeneau, la maison sigue fiel a esa herencia, elaborando vinos que hablan del terroir con honestidad y respeto. Más que una casa, G.H. Martel es un recordatorio vivo de lo que significa transformar un paisaje, una tradición y una memoria colectiva en un arte refinado que permanece.
Champagne Thiénot y el ambicioso proyecto “Le 3”
Nuestra última parada nos conduce a Reims para visitar Champagne Thiénot. Es una maison joven y contemporánea que en 2025 ha abierto un proyecto llamado a redefinir la forma en que el público se acerca al champagne: Le 3 par Champagne Thiénot.
Se trata de un espacio enológico de 5.000 m² ubicado en pleno centro histórico de Reims, concebido para ofrecer una inmersión sensorial, arquitectónica y cultural.
El recorrido atraviesa calados históricos restaurados, invita a descubrir el proceso de elaboración del champagne mediante maquetas, proyecciones y contenidos interactivos, y finaliza con una cata de cuvées de la maison.
La arquitectura juega un papel esencial aquí: piedra tradicional, roble francés y una iluminación cuidada generan una atmósfera sofisticada, cálida y moderna.
Pero Le 3 va más allá de ser un espacio museístico. El proyecto incluye un hotel boutique de 12 habitaciones con spa, un bar panorámico con rooftop sobre los tejados de Reims, áreas de bienestar y salas para eventos privados que abrirán sus puertas el próximo año 2026.
Con esta iniciativa, Champagne Thiénot busca situarse en la intersección entre patrimonio y lujo contemporáneo, ofreciendo una experiencia integral que une cultura, estética y vino.
En suma, Le 3 es una declaración de intenciones: transformar la tradición champenoise en una vivencia multisensorial, moderna y abierta a un público más amplio sin perder su raíz.
Habits de Lumière: la gran cita de diciembre
Y si finalmente decidí emprender ese viaje pendiente a la región es porque del 12 al 15 de diciembre de 2025 Épernay celebrará una nueva edición de Habits de Lumière. Se trata del festival que cada invierno ilumina la Avenue de Champagne con desfiles luminosos, proyecciones monumentales, gastronomía y espectáculos pirotécnicos.
Una cita que ya forma parte esencial de la identidad cultural champenoise y que permite ver cómo la región interpreta su tradición a través de la estética y la vida urbana contemporánea.
