Foto Instagram @britneyspears
La batalla judicial de Britney Spears con su padre se le está volviendo de cara. Y ahora él quiere que sea ella quien pague la factura. Jamie Spears ha presentado documentos legales para que sea el patrimonio de la cantante el que abone los más de tres millones de dólares que solicita. Se trata de honorarios legales, incluidos casi dos millones a sus propios abogados, que están trabajando para mantener la tutela de la cantante de 39 años, según documentos obtenidos por el portal Page Six.
“Si el juez lo aprueba, este dinero provendría del patrimonio de Britney. Esto significaría que ella pagaría a los abogados de su padre para que pelearan contra ella en el juicio”, dijo una fuente cercana a la estrella. En concreto, los tres millones de dólares solicitados por Jamie Spears son para servicios prestados entre noviembre de 2019 y febrero de 2021. “El círculo íntimo de Britney siente que es una cantidad exorbitante de dinero, sobre todo para alguien que no está trabajando en este momento. Y ella ha declarado que no tiene planes de reanudar su carrera bajo el control de su padre”.
En su petición, Jamie Spears, de 68 años, solicitó seguir recibiendo 16.000 dólares al mes por su papel como co-conservador del patrimonio, así como otros 2.000 al mes por una oficina, lo que equivale a 288.000 dólares por un período de 16 meses. También pidió que sus abogados del bufete Freeman & Smiley LLP y Holland & Knight reciban 574.625 y 893.751, dólares respectivamente.
El proyecto de ley de Holland & Knight, en particular, incluye los honorarios del equipo de comunicaciones de la empresa, de 500 a 900 dólares por hora, para responder a las consultas de los medios sobre una tutela que ha sido objeto “de un escrutinio cada vez más intenso, tanto en los medios de comunicación tradicionales como en las redes sociales y también en documentales”, según se lee en los documentos judiciales de Jamie Spears, que hacen referencia a la campaña #FreeBritney de los fans y al documental del New York Times “Framing Britney Spears” que se estrenó en febrero.
“H&K ha ayudado al Sr. Spears a lidiar con asuntos de los medios de comunicación nacionales y globales para mantener la privacidad de la persona bajo custodia y la protección del patrimonio de intrusiones inapropiadas y/o injustificadas”. Además del equipo de abogados de Jamie, la petición establece pagos solicitados de 378.333 dólares al abogado designado por el juez Samuel D. Ingham III; y 238.272 dólares a Loeb & Loeb, el bufete de abogados que Ingham contrató para ayudarlo en el juicio de la estrella del pop.
Jamie Spears ha supervisado la fortuna multimillonaria de su hija Britney desde febrero de 2008. Fue entonces cuando comenzó la tutela de la ganadora del Grammy, poco después de su colapso público. También tenía control sobre sus asuntos personales, incluida la atención médica, hasta que renunció en septiembre de 2019, alegando problemas de salud. Una fiduciaria con licencia, Jodi Montgomery, reemplazó temporalmente a Jamie como procuradora de Britney. Desde entonces ha tomado medidas para sucederlo permanentemente a petición de la estrella.
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