Jennifer Lopez y Ben Affleck se quedan con su nidito de amor
La expareja retira del mercado la lujosa mansión que compraron en Beverly Hills y por la que pagaron 50 millones de dólares.
Jennifer Lopez y Ben Affleck han tenido que afrontar una dolorosa decisión para sus finanzas. La expareja ha retirado del mercado inmobiliario la lujosa mansión que se compraron a principios de 2022 en Los Ángeles. Después de estar un año a la venta y de alguna que otra rebaja en el precio, Lopez y Affleck han optado por no venderla, al no encontrar a nadie capaz de pagar la millonada que pedían por ella.
Valorada en unos 68 millones de dólares a precio actual de mercado, la residencia se encuentra en una de las zonas más exclusivas de Beverly Hills. La expareja pagó en su día unos 50 millones de dólares y querían al menos recuperar lo invertido y algo más.
Jennifer Lopez y Ben Affleck han tenido la casa en venta un año
Parece ser, según revela la revista People tras hablar con una fuente conocedora del asunto, que Jennifer Lopez y Ben Affleck no estaban dispuestos a “asumir una gran pérdida” si vendían la casa a un precio inferior. Su último precio público era de 59,95 millones de dólares.
El mercado de este tipo de inmuebles es muy complejo y no hay muchos inversores dispuestos a pagar cualquier precio por propiedades cuyos costes de mantenimiento también son muy elevados.
Una mansión de auténtico lujo
A la vivienda no le falta ningún detalle. Con diez habitaciones y 17 baños, dispone de una suite principal con un pequeño salón, baño y vestidor, todo completamente equipado.
Además tiene varios salones, dos cocinas totalmente equipadas con islas centrales y un amplio comedor independiente, sala de juegos con mesa de billar, una barra de bar, al estilo de los clubs de los 50 y una sala de cine.
A ello hay que sumarle un bonito y amplio patio interior decorado con una fuente en el centro, y los impresionantes jardines que rodean la vivienda. En la parte trasera cuenta, además, con un bonito porche, perfecto para tomar el sol y, por supuesto, una impresionante piscina de borde infinito.
La casa se divide en dos plantas y destaca por su color blanco y sus enormes ventanales, que llegan a ocupar toda una pared. Dos detalles que proporcionan al interior mucha luz, algo muy necesario, pues en la decoración destacan los llamativos papeles pintados de la pared.