Foto: Gtres
“Éramos tres en este matrimonio, y eso es mucha gente”. Así explicaba la princesa Diana en aquella famosa entrevista a la BBC que su marido le era infiel. Algo que dejaba claro el papel de amante de Camilla Parker Bowles, que pudo comenzar en la década de los 70 y que continuó hasta la muerte de Diana en 1997.
Y es que para Camilla, actual reina consorte del rey Carlo III, ser una amante no era una ofensa, sino un privilegio. “¿Sabía usted que su tatarabuelo, el rey Eduardo VII, fue amante de mi bisabuela, Alice Kepel?” Cuentan que éstas fueron las primeras palabras de Camilla a Carlos cuando se conocieron en un partido de polo en 1970. Allí comenzó su romance.
Ambos eran libres, jóvenes y estaban solteros. Todo iba bien entre ellos pero Carlos se ausentó durante ocho meses por sus obligaciones como príncipe de Gales y Camilla se comprometió y se casó con Andrew Henry Parker Bowles, con el que tuvo dos hijos. La historia del heredero es de sobra conocida por todos.
La actual reina consorte se casó en 1973 y se divorció en 1995. Según Diana, la relacionó entre Carlos y Camila nunca se terminó, aunque se intensificó a principios de los 90, fecha en la que el matrimonio de Carlos y ella ya hacía aguas.
Tras la muerte de Diana, Camilla se convirtió en la mujer más odiada de Inglaterra. Todos la culpaban de la infelicidad de la princesa del pueblo y desde entonces se retiró de la vida pública durante varios años. En 2005 y cuando las aguas estaban mas calmadas, Carlos y Camilla contrajeron matrimonio convirtiéndose ella en duquesa de Cornualles.
Hablamos de un título que también tiene su marido pero que sin embargo es más desconocido, ya que se le conoce desde siempre como príncipe de Gales. En este sentido, el título de princesa de Gales siempre fue de Diana y la Corona prefirió que se quedara para ella.
Así las cosas, la reina emitió este mismo año un comunicado en el que expresaba su deseo de que su hijo Carlos fuera rey y su mujer, Camilla, reina consorte. De este modo, a partir de ahora ella recibirá el tratamiento de Majestad y su principal función será acompañar al rey y apoyarlo. A diferencia de Diana, volcada en causas humanitarias, Camilla ha estado, hasta ahora, más interesada en apoyar temas de la naturaleza, mujeres maltratadas y feminismo.
Aunque los años han calmado la furia inicial del pueblo contra Camilla, lo cierto es que Diana siempre será recordada como la princesa del pueblo. Ahora Camilla, que ya no tendrá que hacer reverencias a otras reinas cuando coincidan en actos, nunca será tan querida como Diana.
Hay que recordar que los maridos de las Reinas, como el duque de Edimburgo, han sido siempre conocidos como “príncipes”, las mujeres de los reyes, como en España, se llaman reinas consortes.
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