La oferta de bienestar y la gastronomía saludable, nuevas exigencias del turista de lujo. Foto: CMC
Todos los tratamientos que te puedas imaginar: faciales y corporales, en solitario o en pareja… puedes disfrutarlos en las amplias y exquisitas instalaciones del spa del nuevo Hotel Four Seasons de Madrid. En una de sus ocho cabinas hay una bañera circular y hasta una chimenea. Y si tienes una vida ajetreada también tienes la opción de saborear una “tapa de bienestar”. Es decir, un ritual de 30-35 minutos en el que se alcanza la máxima relajación sin renunciar a la agenda del día. Pero los tratamientos must have son tres:
El masaje Retiro, en homenaje al pulmón verde de la ciudad, es la joya de la casa. En él se utiliza la radiofrecuencia a través de las manos de la terapeuta gracias al uso de unas mangas que transmiten las ondas. Ideal si tienes alguna contractura muscular porque es muy efectivo. De hecho, la tecnología que utiliza, R200, la conoce bien el futbolista Cristiano Ronaldo.
El segundo tratamiento es el llamado Piece de Résistance. Consiste en un lifting facial con uso de tecarterapia que sirve como solución anti-edad y fuente de iluminación e hidratación. Este tratamiento se hace con productos de la firma británica 111Skin.
El tercer tratamiento es el llamado Experiencia Canalejas. Ideado para combatir la retención de líquidos y eliminar la sensación de piernas cansadas, también hidrata y nutre la piel. Es el preferido de Victoria Beckham cuando acude al spa del hotel Four Seasons de los Ángeles. En el de Madrid se utilizan productos de la firma Sepai y cuesta 230 euros.
Las camas de los dormitorios de la cadena hotelera son famosas en todo el mundo por su gran confortabilidad. Y las camillas del spa Four Seasons no se quedan atrás. Son de la marca alemana Gharieni, anatómicas y adaptables.
El agua de la piscina del spa del hotel Four Seasons Madrid se encuentra a una temperatura constante de 28 grados. El vaso ocupa 14 metros y está rodeado de confortables tumbonas donde relajarse. El espacio está iluminado por luz natural y cuenta con baño de vapor y sauna. Por el momento solo pueden acceder a ella los huéspedes del hotel. Sin embargo, en unos días también podrán disfrutarla durante 3 horas aquellas personas que contraten un masaje en el spa y paguen un extra de 70 euros.
El objetivo del centro es que no se disfrute de sus excelencias de manera esporádica ni solo por los huéspedes del hotel. Por ello ha lanzado dos tarifas anuales de membresía, la platino (4.500 €) y la oro (3.500 €). Entre sus ventajas se encuentra el servicio de lavandería de ropa deportiva, noche gratis de hotel o acceso al gimnasio dotado de máquinas de Technogym y que abre las 24 horas del día.
Y es que según me cuentan en el hotel: “Queremos ser el spa wellness de los madrileños y que vengan cada semana“. Por cierto, antes de comenzar cualquier tratamiento nos conducen a la sala de relajación donde los modernos divanes cuentan con la última tecnología, cortinas para mantener su privacidad, luces automáticas y controles de asiento.
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